Consciencia es una propuesta educativa lúdica orientada al desarrollo del mindfulness y el bienestar personal, diseñada para estudiantes y docentes.
Los habitantes de IluminanDia vienen observando desde hace un largo tiempo como se están comportando los Seres “Humanos”, y la dificultad que muchas veces tienen para resolver sus problemas y vivir felices. Notaron que estos conflictos se han agravado últimamente, por el desconocimiento que muchos tienen del Entorno Digital y las consecuencias de sus prácticas en él. Desde entonces, “Los Corlux” partieron de IluminanDia con la Misión de acercarse a los habitantes del planeta Tierra, y poner sus virtudes al servicio de ellos, para colaborar con su mayor bienestar. En mayo del 2025, aterrizaron en una institución educativa, La Nelson Mandela. Los “CorLux”, pueden comunicarse con el corazón de las personas, en un lenguaje que sólo pueden entender las almas. Para hacerlo, envían sus mensajes en formas de rayos de luz, iluminando las zonas inconscientes del cerebro humano, colaborando así con el despertar de sus CONCIENCIAS. De este modo ayudan a los humanos a entender no solo a la IA (Inteligencia Artificial), sino también a la otra IA, la Inteligencia Amorosa, la fuente de poder sin límites. Los Seres humanos antes de llegar al mundo conocían a los Corlux. Ahora limitados por las formas humanas de sus cuerpos y sus creencias, mucha veces limitantes , se les hace difícil recordar de dónde vienen y para que vinieron al mundo, que quieren ser, que quieren hacer, que quieren tener, que quieren compartir. A los Corlux les cuesta entender como los humanos muchas veces hacen lo que no les gusta y no hacen lo que les gusta, por miedo a no pertenecer o a no ser aceptados. Así los Corlux, vienen a recordarles a los humanos quienes son, de dónde vienen, para que vinieron al mundo. Invitan a los humanos a mirar al cielo y las estrellas , para que al contemplar la infinitud del Universo, despierten a la conciencia de los humanos somos parte de un todo , mucho más que el cuerpo físico, que nace y que muere. Y que mientras estemos habitando sus cuerpos en este mundo, en cada escena humana podemos representar los personajes que elijamos representar en el Teatro de la Vida. Así cuando los personajes elegidos se juzguen a si mismos como impotentes, generarán emociones y reacciones en su cuerpo de impotencia, cuando los personajes que elijan se juzguen positivos o poderosos, generarán emociones y reacciones positivas o de poder. Y ello aún cuando las cosas no siempre se presenten como las planearon. Que desde niños los humanos elegimos el personaje que sentimos permitirán que nos presten atención y al representarlo muchas veces terminamos confundiendo el personaje con quienes realmente somos, sin respetar nuestra esencia. Estos mensajeros de luz saben que gran parte de los problemas que tienen los humanos tienen su origen en que los humanos no recuerdan quienes son, de dónde vienen y a dónde van, cual es su propósito, su Misión en este mundo,. Así los ayudan a recordarlo para que puedan salirse del personaje que estén representando y que no les permita cumplir con su Misión. Los Corlux antes atravesaron experiencias oscuras….y sufrieron un proceso de transformación, antes de a conectar la Virtud, con el Ser de Luz que hoy son. Los Corlux les recuerdan a los humanos que la Vida es un Milagro de Amor, y que todos formamos parte de un Gran sistema, una inmensa red que nos interconecta. Cada ser humano es como una línea de internet, todas las líneas conectadas entre si y todas ellas con el gran Hacedor del Universo. El sistema informático interno de cada ser humano está compuesto por cristales líquidos y óxido de hierro que les permite formar parte de una inmensa red electromagnética. Así la energía que emanan les permite conectarse automáticamente unos con otros y enviar y recibir los mensajes con los que desean conectar, y con nuestra Conciencia Superior, la que todo lo sabe. Los Corlux nos cuentan que los seres humanos, cada uno con sus diferencias, somos complementarios y todos necesarios y evolucionamos como especie cuando trabajamos colaborativamente formando equipos, y cuando como con ojos biónicos aprendemos a borrar las líneas que nos separan de los otros, de la ilusión de separación, despertando a la conciencia de la Gran Fuente de Energía Divina, de Amor Infinito, y de la Gran Conciencia que nos Une. Explican que la fuerza más poderosa que nos gobierna a los humanos es el AMOR. Que el Amor nos atrae, que del Amor nacimos y hacia el Amor vamos, que el amor es el poder más grande con el que podemos contar los humanos. Es un Poder que cada Ser Humano lleva dentro desde que el principio de su existencia, y que cada vida humana es un Milagro de Amor. Así el Amor es la única fuerza que cuánto más se da, más se tiene. Y que cuando los humanos quieran encontrarle sentido a sus vidas, si quieren salvarse y salvar a otros, solo en el Amor hallarán la respuesta. Que a su vez en el mundo es necesario valorarnos en nuestra justa medida, amándonos tal y como somos . Esta es la única forma de sobrevivir y de evolucionar. Que nuestra evolución en la tierra no para nunca. Y cuando termina la existencia en este mundo y el envase que habitamos deje de funcionar, seguiremos existiendo, porque el Amor que somos nunca morirá. Los corlux les enseñan a los humanos que como los humanos somos en esencia Amor, necesitamos sentirnos queridos, así buscaremos hacer todo lo que sea necesario para que lo miren, para que nos presten atención. Sin embargo nos enseñaron prestar demasiada atención al mundo exterior, olvidándose de la importancia de prestar atención a nuestro interior. También enseñan que cuando acecha el miedo más grande, el no sentirnos dignos de ser queridos, o de no pertenecer a un grupo, el camino a recorrer es volver nuestra atención a quienes somos realmente, que somos dignos, que somos amados y saborear nuestras experiencias más positivas. Mientras que centrar la atención en nuestras emociones negativas reduce el mundo, prestar ATENCIÓN a las emociones positivas lo expande, literalmente. Así invitan a los humanos a prestar atención a aquello que una vez nos hizo vibrar en la frecuencia más alta, la del Amor. Y que allí dónde lo encontremos y lo podamos dar, es dónde nos conviene estar. Así al cambiar la mirada van apareciendo las soluciones a nuestros conflictos. Permaneciendo allí en ese lugar dónde fluye el amor incondicional, de golpe todo nuestro organismo se alineará en forma positiva, y podremos conectar con nuestro propósito, con el deseo de colaborar unos con otros, con nuestra misión. Que cada ser humano nace con un Propósito, con una Misión. A través de la intuición, escuchando el corazón, que cuenta con sus propias neuronas, podemos descubrirla. Para tomar buenas decisiones, es necesario escuchar el corazón que cuenta con sus propias neuronas y alinearlas con nuestra Misión. También los Corlux enseñan a los humanos que aprendemos, y disfrutamos o sufrimos según nuestro nivel de conciencia. Que el cerebro es una joya, y que el desafío es aprender a usarlo. Que la atención es la base de nuestra consciencia, así solo existirá para nosotros en este mundo aquello a lo que le prestemos atención. Y allí dónde pongamos la atención plena fluirá toda nuestra energía. Por eso es tan importante elegir bien a que prestar atención. Enseñan a los humanos a observar lo que nos saca libertad, lo que nos convierte en esclavos. Así observar situaciones repetidas que aparecen en nuestras vidas, que no nos gustan, cosas que nos sacan, creencias o mandatos familiares que nos influyen y limitan, en que cosas buscamos permanentemente validación, nos permitirá conocernos más, cambiar nuestros programas mentales, y así volvernos más dueños de nuestras reacciones, y más libres para elegir y cumplir nuestras metas, y nuestra misión. Los Corlux nos cuentan, que los seres humanos reaccionamos muchas veces no por la razón, sino por las emociones que se desprenden de la información que queda grabada en nuestro cuerpo, en nuestro inconsciente. Por eso muchas veces no entendemos las razones de nuestras reacciones, o reaccionamos desmedidamente frente a las cosas. Así prestar atención a las emociones que aparecen en nuestro cuerpo, nuestras reacciones mecánicas e incluso a lo que soñamos, nos permitirá “leer entre líneas”, y así traer aquello que está oculto en el inconsciente a nuestra conciencia. Ante la pregunta ¿Cómo sentimos nuestras emociones, como la tristeza y la frustración sin quedar atrapado en ellas? Sentir frustración o tristeza cuando las cosas no salen como planeamos, es natural. Así permitirnos sentir estas emociones, observarlas y ser consciente de que las tenemos, si bien no es agradable, nos ayuda a aprender y a crecer. Los Corlux invitan a los humanos a no resistirse a estas emociones, experimentarlas recordándonos que que “errar” es parte de nuestro camino de aprendizaje en este mundo, y que si al errar somos amables con nosotros mismos, e incluso sabemos pedir ayuda cuando lo necesitamos, nos hacemos más fuertes. Al abrazarnos tal y como somos, con humildad, se abren para los humanos las puertas al Gran Milagro de Amor, a conectar con nuestra naturaleza de Ser Humanos. Los Corlux han observado que a los humanos nos cuesta aceptar que estamos de paso en este mundo, y que además de nuestros errores, en nuestra vida aparecen muchas veces situaciones inesperadas y muy dolorosas, muchas de las cuales que no tienen vuelta atrás, como la muerte de un ser querido. Así, hay momentos en los que no basta el autoconocimiento, y en que lo único que nos salva es Rendirnos a lo que la vida nos vino a enseñar significa soltar nuestra necesidad de controlarlo todo, con humildad. Así al mirar la inmensidad de las estrellas, y enfrentarnos al gran Misterio del Universo recordamos que los humanos no podemos tener todo bajo control. La humildad viene del latín “humus”, que significa tierra. El humus es lo que queda cuando todo lo superfluo se ha descompuesto, todo lo que se desprende de la naturaleza y regresa a la tierra para fertilizarla. Es oscuro, callado, e invisible a los ojos apresurados. Pero allí, en esa profundidad, germina lo nuevo. Solo quien se deja tocar por la tierra —quien se atreve a descomponerse, a soltar, a caer, “a morir”— puede nutrir la vida. “Ser humano”, entonces, es también aprender a ser humus, abrazar lo que se deshace de nosotros mismos, sostener con humildad lo que se transforma más allá de nosotros mismos, y confiar y esperar lo que crecerá, incluso cuando es invisible, y que Vale la Pena Vivir. Así rendirse con humildad a la vida, no significa fracasar ni darse por vencido y no es un signo de debilidad, e incluso puede ser una estrategia. Al aceptar lo que no podemos cambiar, evitamos gastarnos emocionalmente, luchando contra lo que no podemos evitar, y podemos enfocar nuestra atención, y nuestra energía en lo que si podemos mejorar, confiando en que algo nuevo y mejor vendrá. Así aceptar y rendirse a aquello que no podemos evitar con optimismo ayuda a disfrutar el camino y a tener paz, incluso cuando las cosas no salen como lo planeamos. En nuestro interior eso se siente como un fluir, en lugar de luchar contra la corriente. Y es allí cuando podremos tener más claridad, y tomar las decisiones más sabias. Los Corlux, enseñan que generar hábitos o rutinas permiten transitar en este camino del autoconocimiento, y así esculpir nuestro cerebro hacia el logro de nuestras metas . Ya los científicos descubrieron que gracias a la neuroplasticidad cerebral, prestar atención puede transformar el cerebro, y en consecuencia nuestras conducta humanas. Al igual que hacemos ejercicio físico el entrenamiento mental promueve la vida enfocada hacia nuestros propósitos, hacia nuestro bienestar. Los corlux han colaborado en el diseño de ejercicios especiales para que los humanos puedan entrenar su atención y dirigirla al cumplimiento de sus metas. Se trata de un Kit que les ayuda a conectar consigo mismos, con su corazón y transformar situaciones conflictivas, el miedo, la ansiedad, enojo, el insomnio, la confusión mental, dificultad en estudiar, de concentrarse. A través de estos ejercicios de atención plena, de respiración, de visualización de creatividad, de trabajo en equipo, u otros que libremente elijan los humanos, invitan a los humanos a dirigir con libertad su atención para cumplir sus metas y su Misión como Seres Humanos.
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